No tenés manera de errarle: medís tus pies haciendo tope contra algún objeto firme (pared por ejemplo) a la punto del dedo mas largo. Tomá como referencia el pie mas largo (si, no te asustes, nos pasa a muchos). Ante la duda, que calce cómoda y no extremadamente justa. Si bien las telas ceden, tampoco está bueno andar perdiendo las CAPIBARA por el camino.